Me explico, si pronuncias amor, como habitualmente, nada ocurre, pero, si pronuncias amor con h, entonces tienes que inspirar aire, actúas con el diafragma, inhalas e inhalando aire, es el sentimiento del amor.
Ese suspiro que causa la h del amor, es único.
Me gusta él, pero no me gusta su barba, ni sus tatuajes, ni su pelo, pero me gusta él, un día lo quitare del ambiente y será la viva imagen de mi deseo, te contare el cuento de la niña que se enamoró del pez, de esos amores irracionales.
La niña todos los días observaba la pecera, los alimentaba, encendía y apagaba la luz cada día, hasta que un día se enamoro de un pez amarillo, tanto era su amor, tan locamente estaba enamorada que lo quito del agua, lo apretó contra su pecho y lo beso, luego al instante dejo de ser pez y se convirtió en pescado, murió, al quitarlo de su líquido elemento.
Fue su primer dolor, su primer desengaño, su primera muerte, pero aprendió la lección, sabía que a nadie se le puede quitar de su vida para transfórmala en aquello que nosotros deseamos.
Sabia que le amas tal cual o de lo contrario estas enamoradas de una ilusión inexistente.
Si le transformas, si le quitas de su hábitat, corres que se muera como el pececillo.
Procurad pronuncias amor con h intercalada, al principio un poco difícil, verdad, pero después de logrado, encuentras que en la dificultad está el placer.
Dicen que los males del amor, el tiempo los cura, pero para los que amamos de verdad el tiempo no pasa.
NOTA-Los recuerdos se generan en la estructura cerebral en forma de caballito de mar llamada hipocampo y se almacenan en la corteza prefrontal en la parte frontal del cerebro.