La sombra se come el personaje.
En todos los puestos de responsabilidad, debemos de rodearnos de los mejores, para que esa savia joven o no tan joven, si experta profesional, nos asesores, y beber de esa fuente.
Cuando le preguntaron un día a Amancio Ortega cual era la clave del éxito de Zara, respondió: rodearme de los mejores.
El peligro o las consecuencias, las expongo aquí con dos casos ciertos, uno procede de USA otro de España.
Los tenemos como sombras, siempre a nuestro lado, guardándonos la espalda, pero igual que la sombra te abandona una vez al día, así tu protegido, llegado el momento.
Donal Rumsfeld fue mentor de Dick Cheney, y este fue asistente de D Rumsfeld, quien fue en el gobierno de Busch ministro de defensa.
Pasado el tiempo el alumno supera al maestro, Dick Cheney llega a ser vicepresidente, pero no el clásico, el que está a la espera de la muerte del presi, él asumió plenos poderes,
Se convirtió así en el vicepresidente que más despachos oficiales ha tenido repartidos por los distintos centros de poder de Washington D. C.: el despacho de la Cámara de Representantes, se sumó a los que ya tenía en el Ala Oeste, en el Viejo Edificio Ejecutivo, y sus dos despachos del Senado, uno en el Dirksen Senate Office Building, y otro pegado a la cámara del Senado.
Llagado a este punto el alumno deja caer al maestro, le abandona.
En España sin ser nada parecido, hoy tenemos de jefe de presidencia del gobierno al joven Diego Rubio quien llego a Moncloa de la mano de Iván Redondo, que estuvo 3 años en el mismo puesto.
Rubio se licenció en Historia por la Universidad Autónoma de Barcelona con el mejor expediente académico del país, Completó su formación con un máster en la École Normale Supérieure de Lettres et Sciences Humaines, un año de licenciatura en la Universidad Sorbona-IV de París, una beca de investigación en la Universidad Columbia de Nueva York y un doctorado por la Universidad de Oxford, según detalla el Portal de Transparencia.
No finalizaré sin mencionar que en política, al margen de estudiar al Príncipe de Maquiavelo, se hace imprescindible nombrar al Levitan obra de Thomas Hobbes.
Y recordando que igual que la sombra nos abandona una vez en el día, así igualmente pasa con los humanos.
Entraron de la mano de un tutor, y hoy están ellos, calentando la silla del tutor.
El principio de Arquímedes afirma: «Un cuerpo total o parcialmente sumergido en un fluido en reposo experimenta– un empuje vertical hacia arriba — igual al peso del fluido desalojado».
