25 abril. RevoluciĆ³n de los claveles. La Ćŗnica revoluciĆ³n en que los militares entregan el poder al pueblo.
La Ćŗnica sin muertos por los militares, si murieron 4 ciudadanos a manos de la maldad de la policĆa polĆtica la pide.
Antes comenzar quisiera recordar a estas vĆctimas inocentes.
( Fernando Gesteiro, empregado de escritĆ³rio de 18 anos; JoĆ£o Arruda, estudante de 20 anos; Fernando dos Reis, um soldado de 24 anos que estava de licenƧa na cidade e JosĆ© Barnetto, natural de Vendas Novas com 37 anos de idade);
Capt Salgueiro Maia, la cara de esta revoluciĆ³n, sus restos descansan, en el pueblo que le vio nacer, Castelo de Vide.Mantener las guerras de ultramar era una sangrĆa que no podĆa continuar.
Radio RenaƧensa, primer toque “E depois do adeus”, de Paulo de Carvalho,
A las 0.20 del dĆa 25 de abril de 1974 en Limite se emitiĆ³ GrĆ¢ndola, Vila Morena, que era la segunda y Ćŗltima seƱal para dar comienzo al movimiento revolucionario.
Fue el 9 de mayo de 1972, dos aƱos antes de la revoluciĆ³n lusa, cuando, en su primera gira por Galicia, Xose Afonso cantĆ³ por primera vez el Grandola ante dos mil personas el Burgo de las Naciones de Santiago.Salgueiro Maia se dirige a la tropa “SeƱores mĆos, como todos saben, hay diversas modalidades de Estado. Los estados sociales, los corporativos y el estado al que hemos llegado. AsĆ, en esta noche solemne, vamos a acabar con el estado al que hemos llegado. De forma que, quien quiera venir conmigo, vamos para Lisboa y acabemos con esto. Quien sea voluntario, que salga y forme. Quien no quiera salir, se queda aquĆā. Nadie se quedo
Nosotros tenĆamos algo similar en EspaƱa, a los hĆŗmedos conocidos asĆ familiarmente era, el UMD uniĆ³n militar democrĆ”tica 7 militares en defensa de la democracia.
El soldado le pidiĆ³ un cigarrillo, a una seƱora que llevaba un ramo de claveles, Celeste querĆa comprarle cualquier cosa para comer, pero las tiendas estaban todas cerradas. AsĆ que le dio las Ćŗnicas cosas que tenĆa para darle: los ramos de claveles, diciĆ©ndole Ā«Si quiere tome, un clavel se le ofrece a cualquier personaĀ». El soldado aceptĆ³ y puso la flor en el caĆ±Ć³n de su escopeta. Celeste fue dando claveles a los soldados que iba encontrando, desde el Chiado hasta la MĆ”rtires. Los claveles eran para el restaurante que decide cerrar ese dĆa.
Un fotĆ³grafo hace foto, y he ahĆ la revoluciĆ³n de los clavelesEn mis visitas a Castelo de Vide, siempre mientras viviĆ³ visite a su segunda madre Maria Augusta, prima del padre, a la que Ć©l llamaba madrina, su madre falleciĆ³ atropellada por un autobĆŗs un dĆa que en Lisboa visitaban el parque zoolĆ³gico.
Maia se dirige a negociar con Junqueira dos reyes, estando ya ambos cerca, Junqueira dos Reis se dirigiĆ³ a uno de los alfĆ©reces que ocupaban la torreta de uno de los dos blindados y que empuƱaba una ametralladora pesada y le ordenĆ³ que disparara sobre Maia. El soldado no dispara, desobedece asumiendo las consecuencias este soldado se llama Fernando Sottomayor, Conocido como el hombre que no mato al Capt Maia.
Variedad de libros para conocer mejor la historia, desde aquĆ hoy uno recuerdo nuestro homenaje.Son muchas las anĆ©cdotas, el curso pasado estaba previsto que un capitĆ”n de abril viniera a la USC, facultad de polĆticas dar una conferencia, pero el virus trastoco todo.Esta vez el virus venciĆ³ a abril.
Facultad politicas, claveles para todos, 2Āŗ plantando flores en castelo de Vide 3Āŗ Santarem de aqui salio en busca de la libertad 4Āŗ la placa recuerda el lugar al capt Salgueiro Maia.